lunes, 8 de noviembre de 2010

Los javivis (II)

Cuarto día del viaje, quedan 24h para nuestro vuelo Aswan-El Cairo y tras la visita de un templo cogemos una faluca tripulada por tres marineros egipcios que nos acercará al poblado Nubio. Es la única forma de acceder a ellos ya que el camino al lugar a través del Nilo se hace cada vez más y más estrecho. Este pueblo es el único que ha mantenido la sangre pura desde los faraones sin mezclar con otras razas, exiliados a orillas del Nilo, manteniendo sus rasgos sin alterar.

Reciben a los visitantes ofreciendo de beber de su té, comer de sus platos y fumar de sus cachimbas. Te enseñan e intentan vender sus productos artesanos (a veces con demasiada insistencia), varias mujeres te preguntaban por tu nombre para tatuarlo con jena mientras otros nubios te enseñaban sus cocodrilos y abrían las puertas de sus casas. Allí coincidimos con grupos de turistas que también disfrutaron cantando y bailando con los niños de la aldea.

Era curioso como se echaban al agua con un pedazo de "corcho" y salían al encuentro de tu llegada en faluca, remando con las manos y encaramándose a la barca. Te preguntaban por tu idioma y arrancaban con canciones.




- ¿Por qué nos piden anillos o lo que llevamos?
-Ellos no son pobres, fíjate en la de abalorios de oro que llevan.
-¿Y ya viven bien?
-Son ellos los que quieren vivir así, para mí son los más ricos de Egipto: Para su comida tienen
la mejor carne, no hay contaminación y viven ajenos al caos en el que vivimos los egipcios en las ciudades.

Próximamente el tercer y último Javivis (III))

Buenas noches

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