PORTUGAL Capítulo Final

"LA GUINDA"

Ya habíamos cumplido con la parte de turisteo así que después de visitar Lisboa regresamos a hacer noche en Ericeira con una previsión realmente alentadora bajo el brazo.

Durante la noche, los ladridos y gruñidos de "Chester" me despertaron...eran las 3am y un perro no ladra sin razón aparente....pensé que sería algún que otro animal lo que le había alertado, pero fue entonces cuando oí unos sigilosos pasos al rededor de la tienda. Permanecí inmovil tratando de ver si mi imaginación me la estaba jugando o realmente teníamos visita. A la vista de que los ladridos no cesaban, me decidí a abrir la cremallera linterna en mano y alumbré entre los árboles del pinar....solo alcancé a ver una silueta alejándose de las tiendas......quise pensar que fué un curioso sin malas intenciones sorprendido por el despliegue de cacharros en mitad del bosque ....pero....a esas horas y sin linterna???!?¿!?

El último día fué la guinda del viaje...tres baños largos con olas sensacionales y poca gente en el agua....y todo eso bajo un sol radiante; no nos lo creíamos después de como nos había castigado la "Madre Naturaleza" los días anteriores. Entre baño y baño deborábamos latas de melocotón en almibar y sandwiches de nocilla. Fué un día absolutamente relajado, prescindimos del coche y nos deslpazábamos entre los spots por los caminos de los acantilados....estas caminatas a través del variado paisaje de unos 20min con las tablas acuestas fueron amenizados por la compañía de "Chester", que no se perdió ninguna excursión. En una ocasión, mientras nosotros surfeabamos, él jugaba en la arena con una joven y bronceada portuguesa en topless y con un tanga rosa que dejaba abierta a la imaginación la continuación de un tatuaje que nacía en la parte inferior de su espalda........cuanto nos queda por aprender del mundo animal...

Para culminar un día redondo, dimos una vuelta por el coqueto pueblo de "Coxos" y nos permitimos el lujo de abandonar el campingas (ya en sus últimas) y cenar en el bar del pueblo mientras echábamos timbas de cartas y acabábamos con nuestras últimas existencias de pipas. Estuvimos 2horas en le bar con la única compañía que la de la servicial propietaria que, no permitió que faltasen patatas bravas ni "cerveja portuguesa" en la mesa de los jóvenes extranjeros. Una vez saciados y amenazados con bajarnos la persiana, pagamos y de regreso al campamento (La cuenta no superó los 10€)

Al día siguiente recogimos todo y nos dispusimos a enfrentarnos a los más de 1000km que nos miraban desafiantes desde la autovía A-125. Había sido un viaje muy completo: Olas, acampada,hogueras, pueblos, ciudades,lesiones, recuperaciones, , farra, gamberradas, civilización, naturaleza, desconexión total de aparatos electrónicos, nos empapamos de la cultura portuguesa y hasta patinaje sobre barro.......solo echámos una cosa en falta....la despedida de "Chester".

PURA VIDA

Y con esto acaba el relato del trip a Portugal, moito obrigado a los que habeis querido revivir el viaje a través de estas humildes líneas. Y muchas gracias a los que dejasteis comentarios y os haceis seguidores. ¡Se agradece!