La noche fue una tortura ya que el tamborileo de las gotas sobre el tenso techo de la tienda y la humedad que empapaba nuestras almohadas hizo imposible conciliar el sueño. Al despertarnos, comprobamos el resultado del temporal: Todo el terreno de tierra roja convertido en el paraiso de todo alfarero, nuestra ropa absolutamente inundada y lo más grave...¡Nuestro techo de bambú derrumbado! jaja
El panorama no pintaba bien, estabamos en calzoncillos, la lluvia y el viento azotaban Ericeira y las condiciones para surfear estaban más que lejos de resultar óptimas. Decidimos dejar pasar el tiempo entre leer ("Mujer de rojo sobre fondo gris- Miguel Delibes"), escribir (diarios) y algún que otro tímido deslizamiento sobre el barro.
Subimos al pueblo a un café donde consultar la previsión en internet y al regresar, el Sol se habría camino entre las nubes (fatigadas de tanto joder la marrana supongo) y con él, "Chester" volvió a remolonear por el campamento. Apoyados por las previsiones y huyendo de la segunda parte del temporal que estaba por venir, decidimos emigrar al sur a la zona de "Cascais" así que en 45min de coche nos plantamos en la playa de "Carcavelo".
Nos recibió con un divertido metro playero que surfeamos hasta que la escasez de luz y la curiosidad por un sorprendente agetreo de gente y música en el paseo de la playa nos incitó a salir. Una vez fuera nos informamos y esa misma noche había un festival de música sobre un escenario levantado en la playa que duraría toda la noche....si amigos....llegó el Rock&Roll!!!
Stay tunned!
No hay comentarios:
Publicar un comentario